Un hito importante en la prevención del cáncer cervical se ha fortalecido con un nuevo estudio que vincula los datos individuales de pacientes para evaluar el impacto de las vacunas profilácticas contra el Virus del Papiloma Humano (VPH). La investigación, publicada en el Journal of the National Cancer Institute, refleja resultados prometedores, especialmente entre las niñas vacunadas en edades tempranas.
La investigación utilizó registros de vacunación, datos de programas de detección y el registro nacional de cáncer para exhibir una protección sobresaliente contra la enfermedad invasiva, particularmente en aquellas inmunizadas a la edad de 12 a 13 años con la vacuna bivalente Cervarix. Este estudio complementa y refuerza las pruebas acumuladas durante las últimas dos décadas a través de ensayos de intervención y la vigilancia poblacional con datos del mundo real.
El cáncer cervical, aunque es el principal objetivo de la vacunación contra el VPH, no fue el criterio de valoración de los ensayos que llevaron a su licencia. La Organización Mundial de la Salud recomendó reducir la neoplasia intraepitelial cervical (NIC) de grado 2 o CIN3 o peor, asociada con los tipos de VPH dirigidos por la vacuna, como primer resultado del ensayo. No obstante, este reciente estudio subraya la eficacia de la vacuna en la prevención real del cáncer cervical, enlazando directamente los datos de vacunación con los resultados oncógenos.
Los ensayos clínicos aleatorizados previos, evaluando las vacunas bivalentes (Cervarix) y tetravalentes y nonavalentes (Gardasil y Gardasil 9), indicaron una excelente protección contra la infección persistente con los tipos de VPH de la vacuna, ciertos tipos que reaccionan cruzadamente y las lesiones precancerosas cervicales asociadas. La eficacia de la vacuna resultó superior al 90% en adolescentes y mujeres menores de 26 años que estaban libres del ADN del VPH en el momento de la inscripción en el estudio.
Las críticas de epidemiólogos conservadores que cuestionaron la evidencia basada en la protección contra precursores, han sido refutadas por estudios actuales que muestran efectividad en la reducción del cáncer cervical. Estudios de enlace recientes en Suecia, Dinamarca e Inglaterra, así como un estudio de seguimiento en Finlandia, han corroborado la efectividad de la vacuna contra el cáncer cervical.
La efectividad de la vacuna por grupos de edad
Los resultados indicaron que la efectividad de la vacuna se ajusta inversamente con la edad de vacunación. La incidencia en niñas escocesas vacunadas a los 12 o 13 años fue prácticamente nula, mostrando una efectividad del 100%. A medida que la edad de vacunación aumenta, esta protección disminuye, destacando la importancia de la vacunación oportuna.
Es fundamental que los ministros responsables de Salud y Justicia creen marcos legales que faciliten la monitorización de programas preventivos de salud, incluyendo la vinculación de datos individuales de pacientes. La vinculación efectiva de los datos es crucial para mejorar la calidad y eficiencia de la prevención del cáncer y para evaluar estos programas.