Un estudio reciente llevado a cabo por el Roswell Park Comprehensive Cancer Center, ubicado en Buffalo, Nueva York, trae a la luz los desafíos y posibilidades que existen en la entrega de la vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH) particularmente en contextos de atención oncológica especializada en pacientes pediátricos, adolescentes y jóvenes adultos (PAYA). Los resultados, que surgieron de una investigación con enfoque de métodos mixtos, plantean la necesidad de optimizar la integración de este esquema de vacunación en los programas de atención a supervivientes de cáncer.
Los sobrevivientes de cáncer PAYA corren un mayor riesgo de desarrollar cánceres secundarios, incluidos aquellos asociados al VPH. Sin embargo, a pesar de las recomendaciones del Advisory Committee on Immunization Practices (ACIP), las tasas de vacunación entre estos pacientes son considerablemente bajas. La investigación, que incluyó una encuesta a 49 proveedores de atención sanitaria especializada en oncología y hematología para PAYA, destapó que menos de la mitad de estos profesionales discuten la vacunación con sus pacientes, a pesar de que la mayoría se mostró dispuesta a participar activamente en la administración de la vacuna.
Entre los principales obstáculos para la entrega de la vacuna del VPH identificados estaban factores a nivel de sistema, como la falta de acceso a la vacuna dentro de los entornos de atención al cáncer. Además, una proporción significativa de los encuestados señaló la incertidumbre en las oportunidades de colaboración con proveedores de atención primaria y la falta de pautas clínicas después de la terapia contra el cáncer como barreras importantes.
El estudio subraya que, aunque las vacunas del VPH se ofrecen habitualmente en entornos de atención primaria, los proveedores de cuidados oncológicos consideran en su mayoría que son los médicos de atención primaria quienes deben asumir el rol de vacunar, lo que contribuye a oportunidades perdidas de vacunación durante la atención del cáncer en sus pacientes supervivientes.
Los autores del estudio sostienen que existe la necesidad de integrar la prevención de cánceres secundarios como una partícula crucial en la atención clínica que reciben estos pacientes. Además, resaltan como oportunidad la transición entre el cuidado oncológico y la atención primaria tras el tratamiento, momento que podría ser aprovechado para fortalecer la comunicación y las recomendaciones sobre vacunación entre oncólogos y médicos de atención primaria.
La educación sobre prevención del cáncer relacionada con el VPH se destacó como una oportunidad clave tanto para los proveedores como para los pacientes y sus familias. Además, se identificó la necesidad de mejorar la formación de los proveedores en cuanto a las pautas de vacunación específicas para supervivientes de cáncer y estrategias para abordar la vacilación ante la vacuna.
El estudio, financiado en parte por el NCI y el Roswell Park Alliance Foundation, constituye una base importante para una futura investigación de implementación dirigida a la entrega de vacunas contra el VPH en entornos clínicos oncológicos. Los resultados apuntan hacia una perspectiva positiva y una disposición entre los proveedores de atención oncológica pediátrica y hematólogos para comprometerse más en la entrega de la vacuna del VPH a sus pacientes. Si deseas obtener más información o buscar clínicas de vacunación en Barcelona, este es el camino hacia un avance significativo en la reducción de riesgos de enfermedades relacionadas con el VPH entre los supervivientes de cáncer PAYA.