La inmunoterapia CAR T-cell, una técnica emergente en el ámbito oncológico, se ve potenciada por un nuevo método de separación de células T impulsado por microburbujas y la acción de la gravedad. Este enfoque, desarrollado por Akadeum, una empresa innovadora en biotecnología, podría trasformar no solo los tratamientos contra el cáncer, sino también la monitorización y respuesta frente a pandemias a través de su aplicación en la detección de virus en aguas residuales.
La terapia con células T de receptor antigénico quimérico, o CAR T-cell, es un enfoque de tratamiento que reprograma las células del sistema inmunológico del paciente para reconocer y atacar las células cancerosas. El procedimiento de separación de las células T, que deben ser aisladas y modificadas genéticamente antes de ser reintroducidas en el paciente, representa un desafío significativo debido a su costo, tiempo y posible daño a las células.
Nuevo Método de Separación Celular
El CEO y co-fundador de Akadeum, Dr. Brandon McNaughton, ha creado una técnica que utiliza microburbujas con flotabilidad activa para separar células T eficazmente. Estas microburbujas ligeras se ligan a los componentes indeseados en una muestra y se elevan a la superficie gracias a la acción de la gravedad, dejando atrás las valiosas células T. Este proceso suave y rápido contrasta con las técnicas tradicionales como la citometría de flujo activada por fluorescencia (FACS) y la separación de células activada por magnetismo (MACS), que pueden ser más agresivas y menos escalables.
Impacto en el Tratamiento del Cáncer
El aislamiento y enriquecimiento de células T utilizando microburbujas promete no solo acelerar la producción de terapias CAR T-cell sino tambien reducir sus costos, que actualmente pueden superar los 500.000 dólares por tratamiento. Este avance tiene el potencial de hacer que las terapias sean más accesibles para un mayor número de pacientes y podría disminuir significativamente el tiempo de espera para recibir el tratamiento.
Aplicaciones Futuras de la Tecnología
El Dr. McNaughton también anticipó la posible aplicación de esta tecnología en la detección de virus en aguas residuales, lo que podría permitir una respuesta más rápida y eficiente en futuras pandemias. En este sentido, las microburbujas ofrecen una plataforma versátil que podría beneficiar múltiples mercados e industrias.