¿Qué es la técnica de Inseminación Artificial conyugal (IAC) u homóloga (IAH)?
La Inseminación Artificial conyugal (IAC) u homóloga (IAH) es una técnica de reproducción asistida en la que los espermatozoides del propio cónyuge o pareja son preparados y depositados directamente en el útero de la mujer durante su fase fértil. La IAC busca facilitar el encuentro entre el espermatozoide y el óvulo al reducir la distancia que deben recorrer los espermatozoides y mejorar su calidad mediante una capacitación previa.
¿A quién va dirigida la IAC?
Sociedades científicas como la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM) y la Sociedad Europea de reproducción humana y embriología (ESHRE), indican la IAC en aquellas parejas con una evaluación que sugiere infertilidad de leve a moderada, donde existen razones para suponer que la técnica aumentará las posibilidades de embarazo.
Las pacientes candidatas a IAC incluyen:
- Mujeres menores de 37 años con permeabilidad tubárica demostrada.
- Infertilidad de 1 a 3 años de duración, en las que no se haya identificado un factor severo de infertilidad.
- Parejas con alteraciones leves de la calidad del semen.
No obstante, las indicaciones de IAC dependen del origen de infertilidad:
Esterilidad de origen femenino
Los factores femeninos que pueden ser tratados con IAC incluyen:
- Alteraciones cervicales: Mujeres con defectos en el moco cervical (debido a infecciones previas, cirugías cervicales o alteraciones hormonales) que dificultan el paso de los espermatozoides a la cavidad uterina, pueden beneficiarse de la IAC, ya que esta técnica evita el paso de los espermatozoides por el cuello uterino.
- Factores uterinos: En mujeres con malformaciones uterinas leves, pólipos endometriales pequeños, miomas subserosos o intramurales no deformantes, o endometriosis en estadios I y II, la IAC podría proponerse como primera línea de tratamiento.
- Factores vaginales: En mujeres con vaginismo, definido como la contracción involuntaria de los músculos vaginales que puede dificultar o impedir la penetración, la IAC puede ser una opción útil para lograr el embarazo.
- Disfunción ovulatoria: Las mujeres que tienen ciclos irregulares o anovulación (causada por síndrome de ovario poliquístico, alteraciones tiroideas o hiperprolactinemia) pueden beneficiarse de la combinación de la inducción de la ovulación junto con IAC para mejorar así su tasa de ovulación y concepción.
Esterilidad de origen masculino
La IAC está indicada en casos de alteraciones leves o moderadas del semen, como:
- Oligozoospermia leve: Según la ASRM, cuando el recuento de espermatozoides está entre 5 y 20 millones por ml, la IAC puede mejorar las probabilidades de concepción al concentrar y preparar los espermatozoides para ser colocados directamente en el útero. La tasa de éxito disminuye cuando el recuento es inferior a 5 millones/ml.
- Astenozoospermia: La baja motilidad espermática puede ser compensada mediante la IAC, ya que la capacitación espermática en el laboratorio selecciona los espermatozoides más móviles.
- Disfunción eréctil o eyaculatoria: La IAC es una opción viable para hombres con dificultades en la erección o la eyaculación, siempre y cuando haya una cantidad suficiente de espermatozoides en el eyaculado.
Esterilidad de origen desconocido
Entre el 15-30% de las parejas experimentan esterilidad de origen desconocido, donde, después de una evaluación completa de ambos miembros, no se identifica una causa específica. Según la ESHRE, la IAC puede ser útil en estas parejas, especialmente si se combina con estimulación ovárica, mejorando su tasa de gestación.
Esterilidad de causa inmunológica
La presencia de anticuerpos antiespermatozoides en el moco cervical o en el semen puede ser una causa de infertilidad. La sociedad española de fertilidad (SEF) sugiere que la IAC puede ayudar en estos casos, al reducir la exposición de los espermatozoides al entorno hostil del cuello uterino y permitir que una mayor cantidad de espermatozoides capacitados lleguen al óvulo.
A quién va dirigida la IAD
La Inseminación Artificial con semen de donante (IAD) es una técnica de reproducción asistida en la que, a diferencia de la IAC, la muestra seminal capacitada y depositada en el útero de la mujer pertenece a un donante de semen.
Entre las indicaciones para una IAD se encuentran:
Ausencia de pareja masculina
- Mujeres solteras: Mujeres que desean ser madres sin tener una pareja masculina pueden recurrir a la IAD como una opción para concebir.
- Parejas de mujeres (parejas homosexuales): En parejas de mujeres que desean tener hijos biológicos, la IAD es la técnica de reproducción asistida más comúnmente utilizada.
En situaciones donde la razón para optar por la IAD es la ausencia de una pareja masculina y, por lo tanto, la falta de semen propio, las sociedades científicas como la ASRM y la ESHRE han establecido que se puede considerar esta técnica en mujeres de hasta 40 años. Sin embargo, esta recomendación se aplica siempre que no existan factores que indiquen un riesgo significativo de infertilidad, por lo que siempre será necesario evaluar la salud reproductiva de la mujer previamente.
Con pareja masculina sin posibilidad de aporte de semen
- Factor masculino severo: La ausencia total de espermatozoides en el eyaculado (azoospermia) debido a obstrucción o alteración testicular, el recuento de espermatozoides < 5 mill spz/mL (oligozoospermia severa), la reducción significativa o la ausencia de movilidad espermática (astenozoospermia severa) y la presencia de una alta proporción de espermatozoides morfológicamente anormales (teratozoospermia severa), son indicaciones clásicas de IAD.
- Enfermedades genéticas: En hombres con alteraciones genéticas severas que podrían transmitirse a la descendencia y no es posible realizar un diagnóstico genético preimplantacional (DGP), se sugiere utilizar semen de donante para evitar riesgos de enfermedades genéticas graves.
- Fracaso de la IA con semen propio: Según la SEF, si después de 3-6 ciclos de IAC con semen del cónyuge no se obtiene embarazo, especialmente si hay una baja calidad espermática, se recomienda considerar la IAD.
¿Cuando se desaconseja una Inseminación Artificial?
Existen varias circunstancias en las que la IA no es la mejor opción, ya sea por una baja probabilidad de éxito o por riesgos potenciales. Entre las principales contraindicaciones se encuentran:
1. Edad materna avanzada
Las sociedades científicas coinciden en que la IA tiene una baja tasa de éxito en mujeres mayores de 37-40 años, debido a la disminución de la reserva ovárica y la calidad ovocitaria. La FIV es más adecuada en estos casos, especialmente cuando la reserva ovárica es baja.
2. Factor tubárico severo
Si hay una obstrucción bilateral de las trompas de Falopio o daño severo en las trompas, la IA es ineficaz, ya que requiere al menos una trompa funcional. En estos casos, se recomienda la FIV.
3. Endometriosis severa
La endometriosis en estadios III y IV daña las trompas y los ovarios, reduciendo significativamente las posibilidades de éxito con la IA. La FIV es el tratamiento preferido en estos casos.
4. Factor masculino severo
En casos de oligozoospermia severa (menos de 5 millones de espermatozoides/ml), azoospermia, o alteraciones graves en la movilidad y morfología, la IA tiene pocas probabilidades de éxito. La FIV con ICSI es más efectiva en estos casos.
5. Fallo ovárico prematuro
Mujeres con fallo ovárico prematuro o reserva ovárica extremadamente baja tienen pocas probabilidades de éxito con la IA. Se recomienda el uso de óvulos donados y la FIV en estas situaciones.
6. Miomas uterinos deformantes
Los miomas que deforman la cavidad uterina pueden impedir la correcta implantación embrionaria. Según la ESHRE, en estos casos se desaconseja la IA hasta que se haya corregido el problema anatómico.
7. Alteraciones anatómicas uterinas severas
Las malformaciones uterinas severas o las sinequias pueden dificultar la implantación y aumentar el riesgo de aborto. La cirugía correctiva es necesaria antes de intentar cualquier técnica de reproducción asistida.
8. Infecciones activas
Las infecciones activas del aparato genital, como las infecciones por clamidia o gonorrea, desaconsejan la IA hasta que se traten por completo, para evitar complicaciones durante el embarazo.
Preguntas frecuentes:
¿Cuántos intentos tengo a la hora de hacer una IA de donante?
Las guías de sociedades médicas como la ASRM y ESHRE sugieren que si después de varios ciclos (generalmente 3-6) de IAD no se produce un embarazo, se deben explorar otras alternativas, como la FIV o la donación de óvulos, especialmente en mujeres de mayor edad o con problemas de fertilidad identificados.
¿Tiene más éxito para mujeres de más de 40 años?
La Inseminación Artificial (IA) suele tener menos probabilidades de éxito para mujeres mayores de 40 años, y esto se debe a varios factores, como la reducción de la cantidad y calidad de los óvulos y posibles cambios en la salud del útero. Sin embargo, es importante recordar que cada mujer es diferente, y algunas pueden tener éxito con la IA en esta etapa. Por eso, es esencial hablar con un especialista en fertilidad, quien puede ayudar a explorar todas las opciones disponibles y encontrar el camino más adecuado para alcanzar el sueño de ser madre.
¿Existe algún riesgo?
La IA, aunque generalmente es muy segura, puede conllevar ciertos riesgos y posibles complicaciones. Uno de los principales es el embarazo múltiple, aumentando el riesgo de partos prematuros y bajo peso al nacer. También existe un pequeño riesgo de lesiones en el cuello uterino o en el útero durante el procedimiento, así como la posibilidad de infecciones. Si se utilizan medicamentos para estimular la ovulación, algunas mujeres pueden experimentar efectos secundarios o reacciones adversas, incluido el síndrome de hiperestimulación ovárica (SHO).
No conozco al donante y eso me preocupa, ¿puedes aconsejarme?
Es comprensible que no conocer al donante te preocupe al considerar la IAD, pero en España existen normativas que garantizan un proceso seguro y responsable. Las clínicas de fertilidad buscan donantes anónimos que compartan rasgos físicos similares a los vuestros, lo que puede ofrecerte una sensación de conexión. Además, los donantes deben pasar por exhaustivas pruebas médicas y genéticas, que incluyen evaluaciones de salud, pruebas para detectar enfermedades de transmisión sexual y análisis que descartan condiciones hereditarias. Aunque el donante es anónimo, la información sobre su salud y antecedentes se evalúa cuidadosamente para proteger la salud de tu futuro hijo.
¿Puedo elegir a la persona que me donará el semen?
En España, la normativa sobre la donación de semen establece que la donación es anónima, lo que significa que no puedes elegir a la persona específica que te donará el semen. Sin embargo, las clínicas de fertilidad pueden ofrecerte la posibilidad de seleccionar donantes basándose en ciertos criterios. Por ejemplo, puedes optar por donantes que compartan rasgos físicos similares a los tuyos, como el color de ojos, el color de piel o la altura. Además, los donantes son sometidos a rigurosos exámenes médicos y genéticos para garantizar su salud y minimizar el riesgo de transmisión de enfermedades. Si bien no puedes elegir directamente a un donante en particular, tienes cierta flexibilidad en la selección de características que te interesan, lo que puede ayudarte a sentirte más conectada con el donante en el proceso de inseminación artificial.
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